Te doy la razón. Yo creo que Wan tampoco ha buscado un nicho determinado de espectadores (los que veíamos cine 70 y 80 en esas épocas, o ese bagaje al que te refieres) pero como él mismo manifestó, simplemente pide que los espectadores que vayan a ver esta película se dejen llevar y disfruten de su película.
El problema es que precisamente únicamente los que tienen (o tenemos) ese bagaje ochentero, esa forma de ver y entender el cine de esa época, sí que hemos disfrutado de esta película. Yo cuando fui a verla iba despejado de mente, simplemente iba a disfrutar (y en el caso del director que nos ocupa) disfrutar de sus imágenes y escenas. Yo no iba viendo la película y pensando que si una víctima va hacia un pasillo oscuro, o si una va sola a investigar, o que si el coche se para en un sitio o en otro, o si los actores eran buenos o malos, o que si los FX se notan o no se notan, o que los personajes no tienen un trasfondo dramático. Incluso creo que Wan acierta en jugar un poco al despiste y va manteniendo el interés de las cosas. No pretende desarrollar personajes, no pretende que los personajes sean lógicos o actúen como haríamos nosotros en la vida real. Esta película pertenece a un género que tiene esos mismos elementos. Desde el gialli, o slasher. Se me vienen un montón de películas ochenteras (incluso noventeras) que sigue esos mismos esquemas, y Wan (para bien o para mal) los ha respetado. Esas mismas películas vistas ahora (algunas clásicas y de culto) no serían bien recibidas en el cine actual, porque la gente o el público en general, ahora quiere ver otras cosas. Y en ese aspecto (da igual el género que sea) una película no puede ser genuina, no puede ser ingenua, y todo tiene que ser serio, todo tiene que tener una lógica apabullante, y los personajes tienen que tener un trasfondo dramático aunque el director no haya pretendido nada de eso. Lógicamente suma que muchos sigan empeñados en querer ver un estilo de película al uso, osea, terror estilo Monja, Warrens, etc...
Por último, me resulta curioso como en algunos medios (incluso profesionales) digan al señor Wan cómo tiene que hacer cine. Pareciera que James Wan haya nacido ayer. Wan ha demostrado que es capaz de dirigir una película tan difícil (dificilísimo) como era Aquaman, y no caer en el ridículo. Manejar todos esos elementos, intérpretes, fotografía, planificación, etc...unido a las posibles presiones que hacen las productoras, es algo muy a valorar. Y sumo que gustará o no, pero si el cine actual de un determinado género como el terror digamos...fantasmal, casas encantadas y todo ese tipo de aspectos, es gracias a la mano de Wan.
Por cierto, sobre los tráilers, pues sabemos que tienen que vender la película. Pero parece ser (por lo que leí hace muchos años) normalmente los tráilers los hacen empresas contratadas por las productoras para vender la película. En cualquier caso, Wan siempre ha dicho que que era esta película, una honestidad que es de aplauso, porque no ha engañado a nadie.