La peli de Kenneth Branagh es razonablemente fiel a la novela, salvo el detalle de la creación del monstruo hembra, que es toda una ida de olla.

Hay dos telefilmes que son más fieles aún, uno sueco, de Calvin Floyd, y otro norteamericano, producido por Dan Curtis.

Una miniserie yanqui titulada "La verdadera historia de Frankenstein", pese al título, se va bastante por los cerros de Úbeda.