Volviendo al mito de Frankenstein, y a la etapa Universal, quisiera centrarme en especial en esa obra maestra que es LA NOVIA DE FRANKENSTEIN, para mí una de las diez mejores película de toda la historia del cine.
El previo EL DOCTOR FRANKENSTEIN, de James Whale, partía de una versión teatral de la novela de Mary. Pese a su gran calidad, determinados elementos quedaron en el tintero. Cuando surgió la posibilidad de ampliar el universo con esa secuela, los guionistas recuperaron muchas ideas (argumentales, filosóficas) de la novela. La aportación de una novia al monstruo se menciona en la novela pero no se llega a hacer, pero aquí sí se efectúa (Branagh, en su versión, toma de aquí esa idea, con resultados absolutamente grotescos)
La duda existencial de la criatura está presente tanto en la primera entrega del ciclo (véase la magistral escena del lago, donde aprende lo que es el auto-desprecio, o los intentos del monstruo de alcanzar esa luz que viene desde lo alto y que resulta inalcanzable: un ser en busca de la divinidad) como en la que refiero, donde el monstruo es humillado y mancillado constantemente, mientras que él busca solo ser aceptado. La escena con el campesino ciego (retomada, también, de la novela) es magistral en concepción e interpretación: el monstruo aprende a llorar cuando descubre alguien que lo acepta tal como es.
El doctr Pretorius es, pudiera decirse, la parte maligna del propio Frankenstein, aquella que después reflejaría la Hammer en su portentoso ciclo. Juega a demiurgo, a ser Dios, y maneja al monstruo a su conveniencia.
En fin, me podría alargar mucho más, pero creo que esto es suficiente para mostrar mi opinión y juicio al respecto.
Una cosa sí quiero comentar: en una película no es necesario que se DIGAN o VEAN cosas para desarrollarlas. La sugerencia, el comentario en off, la metáfora... pueden suplir todo ello, y con mayor sensibilidad e ingenio. El paralelismo constante que Whale efectúa entre la criatura y Jesucristo es otro elemento digno de resaltar.