Yo es que huyo de esas situaciones como de la peste... Hoy mismo iba a comprar un poco de pimentón picante, y cuando abro la boca para pedir, salta una recién llegada:

- "Perdona, solo una cosita... ¿tenéis sazonador de pollos?"

(Por educación, y ante la mirada del dependiente, como pidiendo permiso, asiento para que le conteste)

- "Si, es ese tarrito de ahi..."

- "Bueno, pues me lo pones, y me llenas otros dos, y me vas a dar cuarto y mitad de aceitunas, y un poco de pan rallado, y..."

Me entraron ganas de estrangularla allí mismo con sus intestinos recién arrancados, por que fué obvio y evidente que se había colado por todo el morro. ¿Que hice? Callarme. Y aguantar. No me gustan esos enfrentamientos. Prefiero esperarme a calentarme la sangre. Aunque me saliera con la mia, cinco minutos de tiempo no me merecen estar todo el dia jodido recordándolo.

Que le aproveche el sazonador. A ver si indigesta.

Manu1oo1