Me quedo con lo que dice Mister Belvedere en la Fotogramas de este mes:

Y es que el tercer acto de Moonlight es tan pudoroso y a la vez tan elocuente que le da auténtica categoría a un película que en su primera hora navega en varias direcciones
Yo creo que de ahí, de esa mezcla de pudor y fuerza, es de donde sale lo mejor del film.

Saludos