Si tuviéramos que fiarnos de las compañías, no existirían nunca productos mediocres, y éstos siempre han existido. Tal como lo pones parece ser que un comprador de salida es un martir o una figura indispensable. Yo digo que como consumidor, está bien saber lo que se compra y no ir a ciegas.
Imagínate que te compras una tele al que le falta el TDT. Ay... luego en un mes te mandamos un técnico para que te lo ponga. Impensable.