Ayer pude dislumbrar la luz al ver "El embarazado", y aún no me explico como puedo haber vivido sin ella. Dirigida en 1987 por alguien e interpretada por un Andrés Pajares en estado de gracia, esta magna obra maestra pone en duda ese triunvirato ("El Padrino", "Casablanca" y "Lo que el viento se llevo") que siempre destaca como mejores películas de la historia. Con unas interpretaciones sublimes y delicadas (a Pajares le acompañan Luis Barbero y Emma Ozores en los mejores papeles de su historia), "El embarazado" es un prodigio de puesta en escena, de planificación, de unos decorados que quedan amplificados por la espléndida fotografía y de unos efectos especiales (el paulatino embarazo de Pajares es tan natural) nunca vistos en nuestra filmografía.

Obra maestra absoluta a reivindicar. Intenten visionarla (su salud no se lo agradecerá). Edición colleccionista en 3 DVDS ya.