El caso de Ramsay fue una pena, la verdad. Se fue del rodaje de Jane Got a Gun por las disputas con Scott Steindorff sobre el guion y el montaje final, pero al menos ha remontado y demostrado lo buena directora que es. Amazon debería haber tenido los arrestos necesarios para presentar “En realidad, nunca estuviste aquí” este pasado año en USA, y no esperar a abril de 2018...
Patty Jenkins fue la recomendación de Portman para la segunda parte de Thor, pero las consabidas diferencias creativas con Marvel sobre el tono del film propiciaron su marcha de la producción. Luego ha demostrado que puede encargarse de un blockbuster tan entretenido como Wonder Woman, con la misma falta de personalidad que sus homólogos masculinos(sí, creo que el film esta claramente sobrevalorado
).
Gerwig sí que ha sido hasta ahora una ausencia notable. Que en los globos se premiase su película y a Saoirse Ronan y que ella no estuviera ni nominada, para incluir a “convidados de piedra” como el amigo Ridley son el tipo de cosas que arman de razones a los que reclaman mayor presencia de directoras, no ya en los premios, sino siquiera en las nominaciones.
Y es que a la postre, el verdadero debate no es si debe haber “cuotas” en los premios, sino en normalizar situaciones. Los que seguimos año tras año los premios, sabemos perfectamente que todo esto no trata solo de premiar a los “mejores”, sino de dar visibilidad a films, directores, intérpretes o profesionales de la industria que, de otra manera, pasarían totalmente desapercibidos. Todo se compone de inercias, mezcla de oportunidad, publicidad o pura suerte. Todos los años hay films estupendos que pasan injustamente desapercibidos (¿por qué “Déjame salir” y no “múltiple”?). El tema es que el votante de los Globos o de los Oscars no tenga ese inconsciente pensamiento de: “Sí, Lady Bird está muy bien...pero la dirección no destaca en ningún aspecto; voy a votar a Ridley Scott”. Al final es tan sencillo como eso...
Un saludo![]()