En primer lugar, no entiendo por qué hay que usar un tono destemplado para responder a un post que no lo tiene.
En segundo lugar, no aparece en ninguna información a la que haya tenido acceso quién es el poseedor de los derechos para editar estas películas en España. Lo único que se indica en todas las webs es que proviene de Paramount, sin especificar si edita, co-edita, distribuye, envasa, o qué. Y sin hacer mención de si quien edita es otra empresa (no hay más que echar un vistazo a las carátulas en zona..., para observar de quién es el único logo visible). No es, pues, muy difícil de entender que se achaque a Paramount lo que se presenta a todos los efectos como una edición Paramount.
Por otra parte, aunque éste no sea el caso (que no lo sé), no sería la primera vez que Paramount edita sus propias películas sin subtítulos en español (recuérdense "Hatari", "La taberna del irlandés", "En busca de Bobby Fischer", etc).
Sería deseable que las editoras de dvd firmasen con claridad sus productos responsabilizándose así claramente de sus calidades y contenidos, en lugar de escudarse en la resonancia de la distribuidora para respaldar con mejor apariencia un producto deficiente. Y las distribuidoras deberían también pensarse seriamente su función de amparar bajo su firma productos que no cumplen unos mínimos requisitos y que aparecen como propios en todas las webs y tiendas on line. Se evitarían muchos equívocos.
Lo que resulta extraño es pretender que el consumidor determine el origen real de las deficiencias de un artículo a partir de un único firmante visible. Vendría a ser como si, al comprar un salchichón con mal sabor de una prestigiosa marca, hubiera que estar al tanto de si hay alguna otra empresa detrás de la titular, y si la deficiencia proviene de ella o del matadero o del ganadero..., pero sin pensar nunca que la empresa que figura como marca en la etiqueta tenga absolutamente nada que ver con el producto.
Obviamente, los dvds no son comparables en absoluto a los alimentos que atenten contra la salud pero, siguiendo el ejemplo propuesto, es evidente que la responsabilidad no recaerá en los transportistas, pero quizá sí se considere co-responsable a aquella empresa que distribuye un producto a sabiendas de que la fabricación de éste presenta graves deficiencias.
Ah, sobre las responsabilidades ante el consumidor me gustaría puntualizar que, según la Ley de Consumo, en el artículo 27, se especifica que "En el supuesto de productos envasados, etiquetados y cerrados con cierre íntegro, responde la firma o razón social que figure en su etiqueta, presentación o publicidad. Podrá eximirse de esa responsabilidad probando su falsificación o incorrecta manipulación por terceros, que serán los responsables". Quizá es que las responsabilidades que fija la ley son absurdas y ridículas.
Por cierto, ¿quiénes son entonces los chapuceros que realmente editan estos títulos de tan mala manera? Se agradecería la información, si es que se sabe.