Lo que habría que preguntarse quizás es qué le pasó a Kevin Spacey después de la borrachera de éxito de American Beauty. La cantidad de proyectos fallidos en los que se metió después de esa película, tendencia que dura hasta hoy, es importante. Perdió el olfato. Con Thora Birch y Wes Bentley paso lo mismo: jóvenes actores muy prometedores que desaparecen del mapa. Mena Suvari también, aunque lo suyo en American Beauty fue más bien un golpe de suerte.
Los únicos que han desarrollado una carrera coherente desde entonces son Chris Cooper y Annette Bening.