Yo a Lost siempre la he definido como una serie que va mostrando diferentes etapas temporales de la percención humana. Es decir, hasta que punto somos capaces de percibir una realidad determinada en paralelo con la que estamos viviendo realmente. Si os dais cuenta, esa serie bebió mucho de Matrix, a su manera.
Creo que esas etapas fueron el hilo argumental que conducia la serie, como eje paralelo a la historia principal, que no era más que la presencia temporal a lo largo de la historia de la isla. Empezaron con flashbacks, siguieron con los flashfowards, para después mezclarlos ambos. Luego siguieron con los viajes temporales (que para mi lo hicieron magistralmente, porque resolvian muchas dudas de los flash-backs/fowards), y acabaron, como no, con el limbo.
Y hete aquí, la gran clave de toda la serie: el limbo. El limbo, por definición no tiene tiempo, no hay sentimiento temporal. Así como en las otras etapas contadas (flashxxxx y viajes temporales) hay necesidad de sentir una referencia temporal (algo así como un punto de partida del tiempo) con el limbo no hace falta. Es el lugar que morimos todos y da igual que seamos viejos, jovenes, o una realidad alternativa. En el limbo vivimos tal como queremos que fuera, tal como si fuera un sueño. Y precisamente, en esa última temporada, estamos viendo siempre el limbo de cada personaje sin necesidad de tener una "referencia" temporal, y dejando como último el de Jack.
Fue el primero que nosotros vimos a él abrir los ojos en la primera temporada, y será el último que veremos su limbo. Con lo que es un circulo que se cierra en si mismo.
Me too.