El barco se ha hundido, definitivamente: "Piratas del Caribe 3" continua el arco descendente comenzado por la segunda parte, pero mientras que aquella todavía tenía algunos elementos sueltos de interés para mí (elementos de cierto carisma como "El holandés errante" y Davy Jones, un reparto más equilibrado de las escenas de acción, Jack Sparrow como estrella conductora del -escaso- interés de la película), ésta no tiene nada de nada. Es una tergiversación de las razones por las que me gustó "Piratas del Caribe" (la frescura, el sentido de la maravilla y la aventura, el personaje con carisma, un sentido del cuento fantástico marino de tradición culta... -esos fantasmas, cómo me gustaron los fantasmas-), convertidas aquí en puro material de segunda (confusión, dispersión y nulidad argumental, arbitrariedad, personajes pesados y/o inverosímiles, desaprovechamiento de los nuevos escenarios y personajes presentados -¿qué pintaba ahí Chow Yun Fat?-). Se parece más a "El regreso de la momia" (película que tampoco me gusta, ya de por sí "La momia" me parece discutibilísima) que a "Piratas del Caribe", es decir, pura explotación de lujo hollywoodiense de los aspectos más superficiales, huecos, y sin alma del cine de entretenimiento. O bien: de como Bruckheimer acabó por asomar los cuernos. Lo de la primera parte debió de ser una excepción dentro del concepto trivial de cine comercial que tiene este tipo.

Y a los que dicen que una película de piratas al estilo clásico es hoy imposible... ¿Pensáis que "Master & Commander" tendría algo que ver con este subgénero, o que podría apuntar una dirección valida? En realidad esta pregunta es pura retórica socrática, ya que al hacerla creo que estoy dejando clara mi opinión.