Me juego 100 euros a que no hay diferencias salvo que uno esté estropeado.No obstante, propongo añadir una prueba en el protocolo de Matrix que supongo que no es fácil y es enfrentar un amplificador de gama baja con muchas horas ya a sus espaldas, con otro de gama alta/muy alta recién salido del horno. La prueba inversa sería igualmente interesante. Quizá así se podría comprobar si el tiempo afecta por igual a un equipo caro que a otro barato y de esa manera un sobreprecio (razonable, no desmesurado) inicial podría tener más sentido.
Saludos