Estoy dándole despacio. Ayer terminé el capítulo 10 (hermosísimo y muy divertido en modo dominguero) y por lo que os voy leyendo la cosa sigue hacia arriba.
Está siendo un auténtico placer comprobar que los gráficazos no han capado ni un ápice el talento de esta gente. Ante todo son grandes contadores de historias y diría que también han dado un paso adelante en ese sentido.
Nunca un juego justificó tanto la compra de una máquina. Clásico instantáneo.