Un film injustamente ignorado. No inventa la pólvora pero es un buen ejercicio de suspense hitchockiano con pinceladas de Memento y un giro final bien resuelto (aparcando cierta verosimilitud). El incombustible Christopher Plummer en su envidiable madurez (dos nominaciones, un Oscar y seis films a estrenar) demuestra su profesionalidad cargando con el protagonismo del film dotando a su personaje de vulnerabilidad y al mismo tiempo tenacidad. En el veterano reparto hay algunas agradables sorpresas como Martin Landau, Bruno Ganz o Jürgen Prochnow (a quien había perdido la pista hace tiempo).




LinkBack URL
About LinkBacks
Citar
