Magnífica iniciativa, Alcaudón, aunque la inminente revisión de la obra de Fellini, junto a la de Hitchcock, me tendrá bastante ocupado, pero intentaré aportar comentarios de las que tengo, que son bastantes.
De hecho, para complementar el recorrido de Alcaudón, y visto que parece que no piensa comentarlas, reproduzco (usando también el corta y pega), los breves comentarios que dediqué a Un extraño vuelve a casa y Alas de peligro en el "otro rincón" (aquí).
"Un extraño vuelve a casa (The Stranger Came Home, 1954) es un peculiar whodunit (por partida doble), en el cual un personaje francamente desagradable interpretado por William Sylvester vuelve a su hogar, de clase alta, después de estar desaparecido durante años y dado por muerto. Al parecer ha sufrido una larga amnesia a consecuencia de los golpes que le infringió con intención asesina uno de sus amigos (pero no sabe cuál de ellos). Su regreso va a desencadenar una serie de muertes sin que se descubra al asesino hasta el final (aunque se intuye de quién se trata desde el principio). Ambiente sofisticado, clase alta ociosa y sin escrúpulos, como retrato con cierta carga de crítica social tiene su punto, pero como film de misterio es muy flojo, perjudicado por un guion sin demasiado sentido (firmado por el mismísimo Michael Carreras sobre una novela de... George Sanders, aunque al parecer la auténtica autora fue Leigh Brackett) y un final francamente decepcionante. Por cierto, la esposa del retornado es ni más ni menos que Paulette Godard, en una de sus últimas apariciones en pantalla grande.
[Por cierto, esta película se presenta con unos subtítulos en castellano sin acentos, ¡ni uno!]
Alas de peligro (Wings of Danger, 1952) nos cuenta un caso de contrabando y falsificación de moneda encubierto en un negocio de transporte aéreo entre Inglaterra y las islas del Canal y el continente. Con guion del también director John Gilling, se trata de un drama criminal confuso y poco atractivo, protagonizado por un actor norteamericano, Zachary Scott, para un papel que pide a gritos a alguien como Bogart para darle algo de consistencia. Solo la aparición de Kay Kendall en un papel secundario da algo de encanto al film, por lo demás bastante aburrido.
En fin, dos películas de "fondo de armario" en la brillante filmografía de Fisher. Solo para completistas de su obra" [como se supone que seréis los frecuentadores de este hilo].