Precisamente su última película como director de fotografía fue otra obra de David Lynch, THE STRAIGHT STORY (UNA HISTORIA VERDADERA) (1999), con Richard Farnsworth, Sissy Spacek y Harry Dean Stanton.

Y yo, al contrario que tú y como indico en el comentario me parece todo un acierto visual el uso de los filtros de color porque sirve para hacer todavía más ominosa la presencia del Conde.

Y recordemos que Francis ya los había usado en la maravillosa ¡SUSPENSE! para desdibujar los bordos del ancho formato del CinemaScope y de esta forma crear esa insuperable atmósfera malsana que impregna toda la historia.