Siempre acabo comparando esta película con "Batman Forever" por el sentimiento común que me producen. De pequeño me gustaban, ahora las aborrezco a partes iguales. Son terceras partes y, además, comparten su mayor defecto: no aguanto la comicidad tanto de Pryor como de Carrey (excelente actor, por otro lado). En mi opinión, es un bodrio considerable, pero para gustos los colores.
Ahora bien, para mala mala la cuarta parte. Ver a Mariel Hemingway respirar en pleno espacio todavía es algo que no he superado.