Buen análisis mad dog earle, yo añadiría dos cosas. Una es el parecido de esta película con otra de Kurosawa llamada Un domingo maravilloso de un año después, 1947, aunque tengo ambas muy olvidadas. La otra es la carga erótica de las primeras películas de Bergman. Lo vemos en este film en la escena de cama que citas, algo imposible para Hollywood en esa época, que no permitía ni que dos personas estuvieran en la cama al mismo tiempo salvo que una tuviera los pies en el suelo. En sus films iniciales hay varios desnudos evidentes o poco disimulados, como este caso, que en otros países serían un escándalo. Todo esto lo digo porque Un verano con Mónica causó un enorme revuelo, algo que ya había comentado, en Europa por estas cosas y curiosamente Bergman había mostrado más con anterioridad. Sin embargo, parece que en el viejo continente empezaron a conocerle desde Mónica, film donde para mí empieza el Bergman más interesante, por otra parte.
Sobre la película que comentas recuerdo perfectamente la escena de la casita abandonada y parte inicial. A mí sin ser de mis favoritas de Bergman me pareció visible y bastante potable. No es de lo peor de su primera etapa.