Pues la he visto y no me extraña su éxito. Se lo merece. Es la peli más divertido de Asylum con diferencia. Las pelis Asylum suelen ser un soberano coñazo, porque tratan de salvar las apariencias y rellenan metraje con montones de escenas de interiores y diálogos tediosos. Es el problema y, al mismo tiempo, la virtud del estilo Asylum, de hacer pelis de serie z con argumentos demenciales tomados totalmente en serio, algo que las hace interesantes pero aburridas de cojones.

Sharknado es la obra maestra de la receta Asylum. Tiene un ritmo endiablado de ataque de tiburón cada cinco minutos, perfectamente medido. Los tiburones atacan en la calle, te saltan por la ventana, se meten en tu casa... es divertidísimo. Evidentemente los cgis son una cosa vergonzosa y la edición de la peli es una de las peores jamás vista, precio a pagar para rodar escenas tan demenciales como el tiburón que salta de una alcantarilla y es abatido en pleno aire por la chica armada con una escopeta. El espectador se sacrifica y acepta gustoso la infamia de efectos visuales y el montaje desastroso por disfrutar con incredulidad de una historia que alcanza cotas de creatividad nunca vistas en eso de imaginar situaciones aterradoras con tiburones.

La otra gran virtud es la seriedad con la que está afrontado el concepto y la dignidad heroica con la que los actores mantienen el tipo con sus personajes, logrando un trabajo excelente. No hay apenas chistes y no hace falta. Meter humor en esta peli sería un gran error. Sharknado es una peli que hay que tomársela totalmente en serio para que funcione, lograr ese contraste impresionante entre la seriedad de los actores y de las situaciones con lo enloquecido de la idea. Los sinverguenzas de Asylum saben que eso es lo correcto. Y esta vez Asylum lo ha logrado de pleno.