Entiendo que una película así no guste a una amplia mayoría, es arriesgada, dura y además es cierto que el ritmo podría estar más afinado en el segundo acto. Pero me parece tan enorme lo que cuenta y cómo lo cuenta, que con el paso de los días (y la vi antes de Navidad) mi valoración crece. Es una película que se ha quedado a vivir conmigo.