¿Pero qué problema hay con "Los cronocrímenes"? ¡Pero si es estupenda!

Y no creo ser sospechoso de nada, ya que en cuanto a Vigalondo soy un ignorante total, no he visto ninguno de sus cortos, ni me caía bien ni me cae mal, ni lo conozco ni nada por el estilo. Es decir, he ido virgen a la película, con bandera blanca, ni tenía especial interés en que me gustase, ni tenía especial malicia en ojalá encontrarme una mierda. Y me gusta, bastante.

Y el argumento tan manido, casi un terreno común de que es "un corto alargado" es un absurdo que se niega a sí mismo: por definición un corto es una película de pocos minutos de duración. De ahí, se podría considerar que "un corto alargado" o "un corto venido a más" es aquella historia que necesitando de manera natural pocos minutos para ser contada bien, ha sido inflada para durar por lo menos 80 minutos a base de paja. Ese no es ni por asomo el caso de "Los cronocrímenes", historia de paradojas temporales que no se podría contar en menos de una hora ni de coña, y que posiblemente podría sufrir el recorte de muy pocos minutos que tampoco serían minutos de paja, sino tramos que funcionan peor.

Sobre que es epidérmica, creo que ahí está la cuestión: que alguna gente parece que exige que todas las películas cuenten historias de largo recorrido o con unos niveles de profundidad. Y no, eso es solo una opción. Precisamente me gusta "Los cronocrímenes" porque es un film de entretenimiento con una historia muy bien urdida, que apenas sí desarrolla una anécdota de aspecto espiral. Yo que os había leido que si el Vigalondo era un egocéntrico, que si tal y pascual... ¡Pues oye, ésta no es la película de un egocéntrico (salvo por el juego tan criticado de reservarse uno de los papeles, pero en principio yo no dudo de las razones que ha alegado para hacerlo, no hay porqué andar pensando mal de todo el mundo todo el rato, jodidos españoles y su deporte nacional), esta es la películita modesta, muy modesta, de un director-guionista preocupado en contar una historia ingeniosa y poco más!

Así que por mi parte yo me acerqué, y le felicité por su película. Y más le valdría al cine español que hubiera cada año diez propuestas diferentes como la de "Los cronocrímenes". Y a aquellos cineastas que están empeznado y que me puedan estar leyendo, solo un amargo consejo: largaos de España, tratad de abriros camino en USA o donde sea, pero aquí no tenéis ningún futuro, ni el más mínimo futuro.