Se podría hacer diabluras con el guión: hacer un paralelismo entre Kathleen Kennedy y la princesa Vespa en cuanto a decisiones consecuentes de sus "reinos" (flops everywhere). Y eso es solamente el comienzo. Una farsa de la que no se libraría ni el apuntador. Los cuarenta años que han pasado desde el original, con todo lo que ha pasado, bien diseccionado podría dar ser espectacular.

Si yo tengo esbozos de ideas, ellos también. Peeero imperará la prudencia, imagino.