Visto el 3x14, Exposé.

Para empezar, decir que el capítulo deja de lado la trama de VillaOtros y pasa solo en la playa. Volvemos a las particiones de grupos. Aún así, en este caso no es malo del todo.

Lo mejor del capítulo es que es una historia autoconclusiva. Al más puro estilo cuento de terror de la vieja escuela, en que todo comienza como una historia feliz y desemboca en un final terroríficamente dramático. Éste es otro de esos capítulos paréntesis, como lo fue el de Hurley, pero en este caso nada cómico.

Los protagonistas absolutos son Nikki y Paulo, esos dos "nuevos" que venían apareciendo esporádicamente en la serie durante esta tercera temporada, y es un guiño freak a muchas situaciones que los seguidores de la serie han vivido a lo largo de tres años. Su flashback (más largo incluso que la historia de la isla, narra en breves cortes el paso de ellos por la isla, desde antes de llegar hasta las ultimas 8 horas). En ellos reaparecen viejos conocidos que se suman a la fiesta, Boone, Shannon, Arntz y Ethan interactúan con ellos más que los demás, y ven desde fuera lo que los protas van haciendo a su manera. Incluso enseñan que fueron Nikki y Paulo los primeros en descubrir la estacion de vigilancia y la avioneta de Yemi, pero que, al igual que Jack and Co, no lo comentaron con el resto. Genial.

Por cierto, que en esos flashbacks me daba la sensación que muchas veces he comentado con amigos. Y es que los momentos importantes que recordar en la serie ocurrieron en la primera y tercera temporada, y que la segunda sufrió por culpa del alargamiento innecesario al que la sometieron producto de la idea loca de la cadena de que la serie tuviera 7 temporadas. A ver quien recuerda ya a Libby, Bernard, Analulu, la estacion médica o la caminata con los "tailies" pa llegar a la playa... Incluso cuesta ya recordar a Michael o al niñato, que desde que se perdió, no se le echa de menos...

Lo que ocurre en el presente es lo más dramático. Producto de la envidia entre ladrones, amores mal correspondidos, y arañas radiactivas peterparkianas, ambos quedan petrificaos al mas puro estilo mitológico, y son tomados por muertos. Para mayor dramatismo, a falta de minutos para despertar de su letargo, son sus propios compañeros los que los entierran aún con vida, e incluso ella es consciente de como la cubren de tierra, para morir con su tesoro y su pareja. Espléndido.

Todos estaremos de acuerdo en que los personajes al fin y al cabo han dado poco a la serie, pero el fin ha justificado los medios en esta ocasión.

A destacar los momentos en que Sawyer se pregunta una y otra vez quién demonios son esos y por supuesto esos dos minutos finales que se recordarán como uno de los mejores/peores momentos de la serie. Y una guapísima Kiele Sanchez, de la que, como comentaba a rumbero algunos mensajes atras, no convenía enamorarse demasiado, por lo que podía pasar y pasó.