Que tengáis que reducirlo todo al absurdo es muy sintomático, cierto. Eso sí que debe ser difícil. Principalmente porque ni estoy frustrado en lo más mínimo ni le concedo a estas medianías más importancia que la diatriba puntual en un foro de opinión y las cuatro apelaciones en mi grupo de influencia cuando hablamos de cultura pop. Hacemos cuatro chistes a su costa, nos solazamos con algunas ocurrencias de este o aquel producto y tira millas. Le concedéis vosotros mucha más importancia que yo o los míos.
Es simplemente triste -principalmente porque podría haber sido radicalmente diferente caso de hacer las cosas bien, claro- que algo que respetaba, apreciaba y ensalzaré siempre, ya siquiera recuerde a la sombra de lo que,
a mi criterio, fue. En la deliciosa Clone Wars de Tartakovsky se concedieron directrices ineludibles pero al tiempo se respetó bastante la libertad creativa y se concluyó en una aportación muy reivindicable, plenamente consonante y satisfactoria al legado, desde mi apetencia individual subjetiva, por supuesto. Pero hasta ahí. Miro a mi balda y la única Star Wars que me ocupa e interesa,
por dejación ajena, reitero, sigue ahí. Mis cómics también están intactos. Disney sigue haciendo el ridículo, a mi juicio, la lideresa sigue retratándose, desde mi punto de vista y en consecuencia todo está en (des)orden
. Puntualmente aportan algo que me ofrece cierto esparcimiento (alguna escena en Mandalorian, algún episodio de la séptima temporada de Clone Wars y -espero- Tales of the Jedi, y así vamos. Ni tan mal. Pero si no apelaran a Star Wars yo no decidiría emplear mi tiempo en contrastar resultados, literalmente. Las cosas como son. Ni cotiza. Porque mi interés no sería el mismo. Si Rings of Power no apelase a Tolkien y LOTR tampoco la vería. Pero ni han arruinado mi "infansia" (la errata es pretendida, claro), ni tengo menor reparo en reconocer cuando algo está mínimamente a la altura de mis expectativas (en esta franquicia, desde 2015, lo ya expuesto). Ya tengo una edad, gracias.