Menudo chasco. Apresurada, resoluciones innecesarias, chapuceras, regresos que nadie quería.
Y todo esto después de un episodio VIII donde dejaba unas líneas muy claras, con Kylo como líder supremo, aunque con un atisbo de luz y con un sacrificio por parte de Luke que serviría de punto de partida para una nueva rebelión por parte de esta generación y las venideras. Era muy simple y va Abrams y no solo se carga eso sino que también se carga El Retorno del Jedi. Perfecto.