Rambo es una de las mejores sagas que han aparecido en el cine, le duela a quien le duela. Y Sylvester Stallone, le duela a quien le duela, es un pedazo de actor. Quizá no le veremos nunca en una adaptación de Shakespeare o en una película de los Cohen (o sí, quién sabe), pero desde luego es uno de los más queridos, a mi parecer, y uno de los más maltratados en el mundo del cine.
Yo disfruté como un cochino con Los Mercenarios y las reliquias que la protagonizan. Es una película para pasar un buen rato, no tiene un guión que te cagas ni tampoco una banda sonora que te quita el hipo, pero entretenimiento sí te ofrece, y carcajadas también. Todo dios se queja de que Los Mercenarios no vale nada y luego resulta que las ganancias del film son de 274.470.394 dólares frente a los 80.000.000 que costó, más del triple SÓLO en la primera parte, lo mismo que hizo la segunda, con un elenco de oro.
Señores, películas como Cobra, Tango Y Cash, Rocky, Rambo, Máximo Riesgo, Demolition Man, incluso Dredd si me apuráis, son peliculones en su género, y se disfruta viéndolas.
No sé de qué leñes se queja la gente.