En la primera ocasión que ha tenido, Vicky llamó a unos cuantos amigos entre los que mi pareja y yo tenemos el honor y el placer de encontrarnos. Nos tomamos unas copas, charlamos, reimos y lo pasamos genial. No os podeis imaginar la alegría que sentimos al volver a verla tan entera y con tanta entereza como nos tiene acostumbrados desde que la conocimos, hace años, cantando sobre el escenario de CASAGRANDE blues-bar, que siempre será suyo.
Nos contó muchas cosas de la academia, como por ejemplo (esto lo digo aunque me borren el post), que realmente solo pudo elejir canción cuando estubo nominada, que es mentira que ella eligiera Lunas Rotas, que la obligaron a elejir esa canción, entre otras cosas. Los que la conocemos ya sabíamos que ella nuncahabría elegido esas canciones y ahora ella nos lo reafirma. También nos contó que llamó por tlf. a Iván, para preguntarle, en vista de que estaba invitada a "Está pasando", qué a sido lo peor que ha dicho de ella... para que no la coja por sorpresa.
Todas esas cosas, zancadillas, manipuaciones, etc... ya quedaron atrás. Lo importante ahora es que nuestra Vicky es feliz, sigue siendo la misma y le espera un más que prometedor futuro en la música. Gracias Vicky, por ser como eres y cantar como cantas y lo que cantas; gracias a la llamada "Marea Azul" (cuyo nombre yo propuse muy al principio que debería convertirse en Tsunami), por haberla elevado hasta hacerla cumplir su sueño; gracias a Miguel Manzo, por haber sido el único profesor que lo hizo bien; gracias al resto de mal llamados profesores, por que vuestras zancadillas la hicieron más fuerte. Gracias a Risto por su mente preclara, su honestidad y su claridad; gracias al resto del jurado, por que habeis sido tan descarados que habeis dejado claro de qué iba la cosa.
Pero sobre todo gracias a tí, Vicky, por haber llevado cordura, educación, coherencia, sentido común, buen gusto musical y buenas formas, al auténtico corral de la chavacanería. Gracias por ser como eres, por cantar lo que cantas y como lo cantas y por hacerme ver que estaba equivocado cuando pensaba que en este país se premiaba más el corralerismo que la buena educación.