No es exactamente así. Las máquinas responden a un problema concreto, no a un síntoma. Un líder determinado les ha plantado cara, es el factor que está haciendo peligrar su plan y deciden eliminarlo de una forma que parece más fácil que la guerra abierta. Sin duda es lógico pensar que ha habido muchas más complicaciones, que hay más gente importante (en la tercera van a pocos otros cabecillas de la resistencia), etc. El problema es que todas las películas se centran en lo mismo, como si no hubiera más asuntos importantes en toda la guerra, y además tanto intentarlo deja a las máquinas como inútiles. Salvation parecía ir por otro camino: más personajes importantes, planes distintos, los problemas con la resistencia en general... Lástima que no tuviera éxito y no siguieran por ahí. Volver a estas alturas a repetir el esquema original me parece un gran error: no puedes ofrecer más de lo que han dado las dos primeras partes.