La serie se ha convertido muy pronto en la típica de "el caso de esta semana...", donde la "aventura" de cada episodio es demasiado tonta e insustancial, y lo único que reviste cierto interés es la subtrama dramática según se va desvelando la "mitología" que rodea y une a los personajes.

Eso sí, el penúltimo episodio emitido (la primera parte de un episodio doble, el último emitido antes del preceptivo parón navideño) estaba escrito y dirigido por Joe Carnahan, y la diferencia con los demás ha sido como de la noche al día (en especial con su continuación, infinitamente más pobre y pedestre de realización).