Vaya critica mas tonta a un simple chistecuando ademas se entiende perfectamente, vulgar o no.
¡Bienvenido a mundodvd! Regístrate ahora y accede a todos los contenidos de la web. El registro es totalmente gratuito y obtendrás muchas ventajas.Vaya critica mas tonta a un simple chistecuando ademas se entiende perfectamente, vulgar o no.
What makes Megalopolis so strange and, for a big-budget Hollywood film, so singular, is that, just like Vergil’s Aeneid, it is at once accretive, allusive, and idiosyncratic because Coppola is attempting something very few artists have ever done: to speak from inside the imperial organism, even as it begins to crack, and to craft a vision that is both a monument to its grandeur and a requiem for its decline.
Opinión de Conrado Xalabarder en Mundobso. Completamente de acuerdo (negritas mías).
En la línea de las recientes creaciones del compositor, aunque por encima de ellas, esta es una banda sonora que no va mucho más allá del énfasis, que aquí resulta excesivo e impostado. Tiene poca o ninguna sutileza y no satisface otras intenciones que las de impresionar y ocupar los espacios sonoros de modo muy ampuloso pero muy poco explicativo. El tema principal, por ejemplo, es muy reiteradas veces empleado pero solo como cita, no dramáticamente ni como plasmación del poder o el peligro del monstruo. Es un tema que en sí es excesivamente sencillo, sin ninguna sutileza pero, eso sí, es muy efectista: una pequeña frase repetida sin parar, para que quede memorizada forma una melodía con la que podría trabajarse un desarrollo que hiciera el peligro cada vez mayor, o más imprevisible... pero que se limita simplemente a ser recordada. Esta falta de evolución es lo que hace que el conjunto de esta obra sea tan plana y acabe por ser monótona. Temas secundarios para las acciones y referencias exóticas, con coros, simplemente rellenan, pero no la hacen crecer, y además la acaban colapsando: no todo en la película es tan importante para ser tratado musicalmente como si lo fuera, y por ello el resultado acaba por ser muy aparatoso y poco comunicativo. Está, eso sí, impecablemente bien hecha en lo que se refiere a su producción, pero no tiene niguna personalidad y en la mayor parte de las veces opera más como parte de los efectos sonoros que como un elemento de narración.
What makes Megalopolis so strange and, for a big-budget Hollywood film, so singular, is that, just like Vergil’s Aeneid, it is at once accretive, allusive, and idiosyncratic because Coppola is attempting something very few artists have ever done: to speak from inside the imperial organism, even as it begins to crack, and to craft a vision that is both a monument to its grandeur and a requiem for its decline.
Aclaro que la reseña de mi post anterior hace referencia a esta The Mummy (su banda sonora)
What makes Megalopolis so strange and, for a big-budget Hollywood film, so singular, is that, just like Vergil’s Aeneid, it is at once accretive, allusive, and idiosyncratic because Coppola is attempting something very few artists have ever done: to speak from inside the imperial organism, even as it begins to crack, and to craft a vision that is both a monument to its grandeur and a requiem for its decline.