Voy a ser la nota discordante.

Me ha parecido que tiene una primera parte agradable, en la que Tim Burton exprime perfectamente la relación de Victor con su perro Sparky para conseguir toda la empatía del espectador, sobretodo del espectador que tenga mascota, pero lo hace a base de explotar una historia mil veces vista y leída: la de Frankenstein, con lo que cero sorpresas.

La segunda parte, vista con cierta distancia y objetividad, es una serie de gags y persecuciones de monstruitos que no cuenta absolutamente nada.

Para gustos colores, pero no entiendo tanta unanimidad en tildarla de obra maestra. Es corta, es simple y usa la sensiblería para manipular.

Creo que los cinéfilos sobrevaloramos los "homenajes" y la estética por encima de la historia en multitud de ocasiones. A veces, tanto homenaje es simplemente falta de ideas, y tanto estética es maquillaje para un argumento demasiado enclenque.

Para niños fabulosa. Para adultos que saben que Tim Burton fue capaz de mucho más, una película POBRE.

Eso sí, el personaje del maestro excepcional.

Le doy un 5.