Dos consejos. Cuidadito con los tornillos de las bisagras que petan el agujero y yo me equivoqué en alguno. No queda muy visible pero se ve algo.
Por otro lado, paciencia con las puertas. Son todo un reto para su impecable instalación (yo también que soy muy, pero que muy quisquilloso con estas cosas y tienen que quedar todas con una alineación perfecta.
Yo también pienso que normalmente no haría falta clavarlas en la pared pero os aseguro que al poner puertas no me arriesgaría en absoluto. Pesan mucho y nunca se sabe el golpe que puede recibir el mueble.