Yo, sinceramente, no puedo entender como para una película como ésta se puede elegir semejante diseño (lo mismo aplica al steelbook de El Puente sobre el Rio Kwai). También he de reconocer que por lo general no soy muy partidario de este tipo de diseños, a no ser que reproduzcan carteles antiguos pintados, que eran y son joyas.
Bueno, supongo que "o lo tomas o lo dejas", pero me entristece ver una película como esta con un envoltorio tan frío (de nuevo, para mi gusto, que por suerte no es el de todo el mundo).