Hombre se entiende perfectamente que cuando adquieres esa propiedad intelectual de la película en formato físico, es algo que está regulado por unas leyes que normalmente se te recuerdan al inicio de la reproducción, para recordarte que no puedes hacer lo que te venga en gana con dicha película sin incurrir en un delito tipificado por las leyes del país, o sea, que no puedes exhibirla, piratearla, etc. Más allá de eso, sí, adquieres la propiedad de la película en el formato físico adquirido para hacer uso de ella como te venga en gana dentro del ámbito doméstico del hogar, etc. No busquemos tres pues al gato.