Creo que aquí estamos todos de acuerdo. Que cambien, modifiquen, manipulen…… lo que quieran pero que mantengan una copia con el principio artístico de la obra cuando se creo. Es decir, el material de partida cuando fue presentado en salas de cine y por la que fue nominada y otorgado el premio a la mejor fotografía “entre otros” hasta llegar a la cifra de 11 Oscar.

Películas de este calibre “gusten más o gusten menos” hay que cuidarlas y mimarlas porque se convierten por méritos propios en algo que entran en los cánones de obras de arte, al igual que la pintura, la arquitectura, la música o la escultura. Cualquier pieza creada tiempo atrás merecen ser respetadas mínimamente.

Lawrence de Arabia, Lo Que el Viento se Llevó, Casablanca, Los Siete Samurais, El Padrino, 2001: Una Odisea del Espacio y tantas otras merecen que las próximas generaciones las puedan visionar en todo su esplendor cinematográfico independientemente de que introduzcan copias totalmente digitalizadas y o manipuladas por sus creadores.