Yo en esos primeros momento de la lectura disfrutaba con las espinas que va clavando Lessing en las vidas de los Lovatt. Bueno, no sé si disfrutar es la palabra, la verdad es que me dolía. Más tarde, cuando nace Ben tras ese sensacional y psicológicamente desgarrador embarazo, ahí es cuando decide soltar la bomba que lo desintegra todo.
No puedo dejar de pensar en la novela, creo que quizás es porque, salvando las distancias, comparto (o compartiría) mucho de los deseos y miedos de la pareja. No, no el de tener 6 hijos.
Quizás una de las observaciones que mejor explican el comportamiento precipitado y casi compulsivo de Harriet y David es la que hace Dorothy:
“You two go on as if you believe if you don’t grab everything, then you’ll lose it”