Después de 2 estimables películas como son Moon y Código fuente, Duncan Jones se atreve con este producto de encargo basado en el famoso videojuego de Blizzard y no le ha podido salir peor la jugada.

Parece ser que las películas basadas en videojuegos no tienen derecho a tener guiones decentes y se sigue apostando todo al espectáculo visual con el que contentar a las masas que consumen palomitas en el cine. Y aquí esa máxima se sigue a rajatabla.

También parece extraño que un película con este despliegue de medios y con un director tan competente tenga una dirección de actores tan horrible, una de las peores que he visto en mucho tiempo. Hay pocos a los que salvar de la quema, tal vez a Ben Foster o Paula Patton pero es que en su mayoría todos están fatal, interpretan con desidia sus papeles, empezando por un Travis Fimmel absolutamente desafortunado, o un Dominic Cooper totalmente fuera de la película. Es curioso ver como los actores recreados por CGI están mejor dirigidos y son más creíbles en sus interpretaciones que los “humanos”.

Hablando del los efectos especiales, pocas pegas se le pueden poner estando ILM detrás. A veces se nota demasiado el cartón piedra en algunos escenarios, y alguna vez da la sensación de estar asistiendo a una película de animación, pero por lo general la integración de los personajes reales con los generados por captura de movimiento están muy bien y son competentes. Los escenarios están bien recreados y la fotografía de Simon Duggan está a la altura de lo que se le pide a la película, siendo veterano en estas producciones con exceso de CGI (Yo Robot, 300: Rise of an Empire...).

El diseño de producción es bueno, aunque tal vez es un poco extraño ver a los humanos ataviados como en el videojuego y todo suena a algo ya visto, pero supongo que no se puede ser muy original cuando intentas recrear algo ya visualmente explotado.

Otra oportunidad perdida y todavía esperando a que se tomen en serio alguna vez el adaptar un videojuego a la gran pantalla. Próxima parada, Assasin´s Creed (a ver si dan con la tecla.)