Entre esas vicisitudes hay la de cómo finalizar la película. En la copia que tengo (BD de Universal) hay hasta dos finales alternativos, ambos muy diferentes al final definitivo. Mal síntoma si un director tan meticuloso como Hitchcock, que prácticamente dejaba listos sus films antes de empezar a rodar, tuvo tantas vacilaciones a la hora de concluir su película. Para mí Topaz es una película llena de posibilidades, pero no bien llevadas a término. Desde luego, el reparto no ayudó en nada. Tampoco la banda sonora de Jarre, acostumbrados como estamos al sonido de Bernard Herrmann.
Respecto a la novela de Uris, que no he leído, no hay que olvidar que los materiales literarios de partida nunca fueron algo que impidiera a Hitchcock lograr filmar grandes películas. Incluso él mismo teorizó en su conversación con Truffaut sobre la conveniencia, precisamente, de no trabajar textos literarios de calidad, porque le podían condicionar el resultado final. El esquema argumental no está lejos de sus films sonoros británicos, por ejemplo, aunque es cierto que el carácter episódico de la trama esta vez está, a mi modo de ver, mal hilvanado. Pero, en fin, ya llegaremos a Topaz, que nos quedan aún muchísimas películas en medio.