La de Michael Anderson tiene dos finales, uno fiel al libro, y otro diferente para el mercado americano.

Parece ser que la viuda de George Orwell congeló la distribución, y no podía verse.

Yo la tengo. A ver si un día me pongo y os cuento... Pero lo que he ido mirando al tun-tún parece fidelísima a la novela.