Yo nunca he alzado la voz a nadie de un SAT. A nadie de un servicio de información ni de reclamación. A nadie de un seguro ni un teleoperador de ninguna clase. Es más, suelo acabar con "gracias por tu tiempo y buen turno". Por muy mal que me hayan tratado. No han sido pocas las veces que he recibido soluciones despues de eso.
Siempre he tratado con respeto y educación. Y rara vez no he obtenido lo que quería. Incluso más de lo que solicitaba, muchas veces. Y ojo, con buenas formas es incluso más fácil buscar la complicidad de un currito que siempre está explotado y en un trabajo desagradable... exponiendo mis problemas así siempre he obtenido respuestas.
Igual que siendo un energúmeno, nadie consiguió de mi nada en mi época cara al público.
Y si llego a una situación en que podría querer desahogarme como tal energúmeno, significa que esa no es la persona que va a resolver mi problema. Será que no hay modos de tratar con una empresa...
Nunca he encontrado que un bien o servicio problemático mereciera que me rebajase hasta el punto de faltar al respeto a nadie. A todo eso se le llama EDUCACIÓN.