Esto sólo es cierto en el caso de los clientes que se enteren del fallo (el producto sigue publicitándose, pero no así el error de la edición: de ese no se avisa en absoluto) y de la posible política de devoluciones y cambios (de la que tampoco se ha informado fuera de este foro, que yo sepa).
Aquellos que no se percaten de que el formato ha sido alterado y no concuerda con las especificaciones que facilita la empresa editora, habrán comprado de buena fe y añadido a sus colecciones una edición que no concuerda con lo que les han ofrecido.
Se mire como se mire, si una empresa es consciente de que su producto es incorrecto y persiste en publicitar que no lo es y venderlo como si no lo fuera, no está teniendo una actuación comercial correcta. Del mismo modo, si declara entender perfectamente la frustración de los clientes y manifiesta una loable disposición a enmendar el error, resulta incongruente que, sin embargo, continúe anunciando y vendiendo la edición que está generando esas consecuencias que dice lamentar, multiplicando con ello unos problemas y decepciones que pretende arreglar después.
Insisto otra vez: si la edición presenta un error, si las especificaciones publicitadas no se corresponden con la realidad, si consecuentemente se va a proceder a la sustitución por tales deficiencias... ¿por qué se mantiene a la venta? ¿para procurar que la compren clientes desprevenidos?