Yo la vi ayer y me ha parecido una barbaridad, de lo mejor que he visto esta temporada y, probablemente, en mucho tiempo.

Qué manera de capturar tantas sensaciones, tan física, con tanta sutileza y, a la vez, con tanta precisión. Una película realmente emocionante.

Y lo digo en una semana larga en la que, a razón de peli al día, me he ventilado los principales títulos que van sonando para la pre-campaña de oscarizables: HOSTILES, THREE BILLBOARDS... , THE POST, PHANTOM THREAD, I, TONYA, GOOD TIME, y MUDBOUND (y si nos remontamos al último mes entero, podemos incluir LADY BIRD y THE SHAPE OF WATER a título de inventario). Y, salvo la de Paul Thomas Anderson, ninguna le llega a la suela de los zapatos a esta.

Si acaso, la única pega que le pondría es que es demasiado "bonita", demasiado perfecta y tópica como fantasía romántica homosexual: la belleza de los dos, la villa italiana idealizada, la familia inmersa en la cultura en donde se hablan cuatro idiomas, el chaval tocando el piano, los padres tan comprensivos...

Pero, ya digo, por ponerle alguna pega y como racionalización a posteriori, porque durante la película no me impidió emocionarme. Y si no se os llenan los ojos de agua con ese final... y me refiero LITERALMENTE al final, a los créditos... es que no tenéis corazón.