Coincidiendo parcialmente con el hecho de que el glamour y el recurrir a las estrellas puede que esté debilitando la fortaleza de los festivales, también creo que Cannes es el festival que mejor aguanta en este sentido. Primero porque creo que siempre ha llevado unido a su nombre esa parte de glamour y segundo porque también, cuando quiere, sigue premiando películas poco sospechosas de venderse al star system. Además que sigue siendo el festival de festivales y creo que puede elegir lo mejor de la cosecha de las dos tendencias.

Antes se ha comentado que por ahora las dos favoritas son Carol y Son of Saul, la primera parece que es un ejemplo de gran calidad de la primera tendencia y la segunda, palmario ejemplo del segundo enfoque (ópera prima en húngado de un discípulo de Bela Tarr).

Yo veo más amenazante el hecho de que muchos directores de esta edición, de lengua no inglesa, hayan realizado sus películas en la lengua de Shakespeare. Veo este peaje para acceder a mercado tal vez más peligroso que el recurrir al star system.

Saludos