Hola Frank Black:


Es verdad que habían CRT muy caros, tienes toda la razón, incluso estoy de acuerdo en que Panasonic es una posibilidad muy estimable para aquellos que desean una buena relación precio calidad. De hecho ahora con los que se comercializan a partir de Marzo-Abril, se abre una posibilidad muy prometedora que genera no pocas esperanzas.

En fin lo que te quiero decir es que estos aparatos y los precios que hoy pagamos por ellos, nos hacen muy felices a muchos de nosotros y a diferencia de lo que tú piensas, si veo evolución en los mismos por parte de los fabricantes y que la mayoría de ellos renueva aanualmente su gama, lo que salvo excepciones siempre conlleva alguna mejora
No sé de donde sacas que pienso que no hay evolución, sinceramente creo que nunca lo he dicho; lo que si digo es que no terminan de proporcionarnos un producto de confianza que satisfaga plenamente al consumidor. En cuanto a la felicidad que proporcionan, es proporcional a la poca exigencia que tengamos en el producto, y hablo en general, teniendo en cuenta que hay marcas que procuran dar una calidad y un precio razonable.

Todos sabemos los problemas del LCD, y que desde los primeros que llegaron al mercado hasta el momento, es evidente que ha habido evolución, pero repito que adolecen de unas carencias tecnológicas que le impiden ofrecer una imagen que justifique lo que por ellos se pagan. Un claro ejemplo es el Bravia X3500 (he tenido la oportunidad de leer a personas que lo han devuelto al comprobar la falta de fluidez en la imagen, y el emborronamiento en los movimientos rápidos. Sin embargo creo que en cierta medida es responsabilidad del consumidor, que es poco exigente. La mayoría de los LCD vendidos en España son auténticas máquinas de pixelar.

Por otro lado nos encontramos con los plasmas, que evidentemente ofrecen una mejora sustancial frente a los primeros, pero de nuevo nos encontramos con las carencias y limitaciones de su tecnología. Entre ellas y no menos importante los quemados. Prueba de que existe ese riesgo, y como ya dije, es el orbiter de Pioneer. Otro argumento de peso es su elevado precio, que en el caso de esta marca es un auténtico disparate.

De todas formas esta es una visión personal con la que intento sensibilizar a quienes nos dejamos llevar por el entusiasmo, en la esperanza de que erremos lo menos posible. Es nuestra única defensa al enfrentarnos a un mercado que nos inunda de color en llamativos anuncios (léase Sony), y de pixeles en bonitas pantallas.

Un saludo y gracias por dar tu opinión.