Servidor NO es el mayor fan del quebequés (sin disgustarme, cónstese. Enemy es una MARAVILLA, sin ir más lejos) y veo aportaciones interesantes en planificación, composición y puesta en escena, fotografía e incluso TONO apriorístico (con esa acusada solemnidad sin apenas concesiones) y demás... que ME REvenden -innecesariamente- una película que INEVITABLEMENTE cataría por ser la adaptación del libro que es. Hasta ahí todo más que correcto.

No obstante, hay ALGO en este avance que ME da mal pálpito...y NO se fundamenta en NADA concreto más allá de una percepción particularísima, NO por lo que se propone formal o narrativamente per se en absoluto, ya digo, sino en lo que respecta a la consideración que la propia Warner parece tener respecto a las posibilidades crematísticas de la propuesta. Deja en el paladar un regusto amargo, a avance casi desesperado, explícito a demasiados niveles y CASI desde la asunción CORPORATIVA de que QUIZÁS no veamos una segunda entrega. Espero que TODO quede en eso, en mero pálpito infundado.

Pero en ESTA Warner NO confío NADA DE NADA.