Segunda (y demorada...) entrega del...
PROGRAMA DOBLE: CLÁSICOS (IGNORADOS Y/O DESPRECIADOS) DE LA CIENCIA FICCIÓN DE LOS AÑOS 50
FIVE (1951)
Director: Arch Oboler.
Productor: Arch Oboler.
Producción: Lobo Productions.
Distribución: Columbia Pictures Corp.
Guion: Arch Oboler, basado en un episodio del serial radiofónico “Lights Out” (1934-1947) titulado “The Word” escrito por Arch Oboler y protagonizado por Bette Davis y emitido en 1938 (no acreditado).
Fotografía: Louis Clyde Stoumen, en blanco y negro (1.37:1).
Diseño de producción: Arch Oboler.
Música: Henry Russell (y William Lava y Charles Maxwell – no acreditados -).
Montaje: John Hoffman.
Reparto: William Phipps (Michael Rogan), Susan Douglas (Roseanne Rogers), James Anderson (Eric), Charles Lampkin (Charles) y Earl Lee (El señor Barnstaple).
Presupuesto: 75.000 dólares.
Rodaje: cuatro semanas y media / … (Arch Oboler Complex, 32436 Mulholland Highway, Malibú, California, EUA).
Duración: 1:30:56 (Copia en DVD editada por L’Atelier 13 Pictures en 2009 dentro de su colección “Lo mejor y lo peor del cine de ciencia ficción”).
Estrenada en Nueva York el 22 de abril de 1951 y difusión general a partir de octubre.
Recaudación: …
…
...
Si THE MAN FROM PLANET X fue la primera película de ciencia ficción en mostranos una (presunta) invasión alienígena FIVE fue igualmente la primera en describirnos las consecuencias de una guerra nuclear a escala mundial.
A pesar de ser todavía menos conocida que la cinta anterior FIVE me ha parecido notablemente superior y por ello me ha parecido extraño que no tuviera entrada propia en el excelente dossier dedicado al “Pánico nuclear” aparecido este mismo mes en la revista “Dirigido por…” (n.º 552, julio/agosto 2024), aunque sí es mencionada (p. 39) en los textos que preceden a las 32 películas seleccionadas.
A pesar de contar con un presupuesto (algo) superior al de THE MAN FROM PLANET X lo cierto es que toda ella se rodó en exteriores y no solo eso sino que la mayor parte de la acción transcurre en el propio Arch Oboler Complex diseñado por el mismísimo Frank Lloyd Wright (1867-1959) situado en el rancho de 306 hectáreas que el director/productor/guionista/diseñador de producción Arch Oboler (1909-1987) poseía en la sierra de Santa Mónica, al sur del estado de California y más en concreto en la casa de invitados del mismo dado que la familia Oboler ocupaba la vivienda principal.
https://flwrevivalinitiative.org/pro...boler-complex/
Aunque en los títulos de crédito no se indica el argumento (o al menos parte de él) se basa en un episodio del famoso serial radiofónico “Lights Out” del propio Oboler y protagonizado por “la más grande entre las grandes”…y emitido en 1938 aunque no he podido determinar la fecha exacta dado que la mayor parte de los mismos ya no existen y tampoco los registros que les acompañaban.
Si ya THE MAN FROM PLANET X nos mostraba un tipo de “invasión” alienígena que no sentaría precisamente cátedra (a excepción de títulos tan destacados como ULTIMÁTUM A LA TIERRA [1951] o IT CAME FROM OUTER SPACE [1953]) el caso de FIVE es todavía más singular hasta el punto de que algunos críticos de la época (e incluso de hoy en día) la llegaron a incluir dentro del denominado “cine de arte y ensayo”.
FIVE no es más que...
FIVE fue la 4ª película como director de Oboler aunque sería la 5ª, BWANA, EL DIABLO DE LA SELVA (1952), la que le proporcionaría sus mayores réditos.
Estrenada el 26 de noviembre de 1952 en Los Angeles BWANA, EL DIABLO DE LA SELVA fue la primera película rodada (y estrenada) en 3-D, protagonizada por Robert Stack, Barbara Britton y Nigel Bruce y que según el número del 13 de enero de 1954 de la revista Variety recaudó la nada despreciable cifra de 2.700.000 dólares.
Desconozco la recaudación de FIVE pero digamos que fue... sustancialmente menor…
Como reza el título de la película, son 5 las personas que parecen haber sobrevivido en todo el mundo al holocausto desencadenado por las dos grandes superpotencias.
Curiosamente FIVE se abre de la misma forma que se cierra ¿TELÉFONO ROJO? VOLAMOS HACIA MOSCÚ (1964), de Stanley Kubrick, la obra cumbre del subgénero...
Un inmenso hongo nuclear que si en la primera tiene un cierto carácter bíblico en la segunda tiene más bien un efecto liberador.
Ese tono bíblico queda claramente expresado al inicio y al final de la proyección cuando se superponen dos textos de la misma extraídos el primero del Libro de los Salmos (103:16)…
y el segundo del Libro de las Revelaciones (21)…
Y pese a ello la película no tiene ni de lejos el carácter religioso que impregna a la mucho más famosa (y exitosa) LA GUERRA DE LOS MUNDOS (1953), de Byron Haskin para George Pal… y que es uno de sus principales debes…
Aunque pueda parecer paradójico a pesar de que efectivamente son 5 los protagonistas no siempre son los mismos…
Veamos.
La primera persona que hace acto de aparición es, curiosamente, la única mujer del grupo, Roseanne, un ama de casa y esposa de un arquitecto (la austríaca Susan Douglas Rubeš [1925-2013]), quien bien podría convertirse en la nueva Eva… dado que además está embarazada de su difunto marido…
1 + 1 = 2
En su deambular Roseanne se dirigirá mecánicamente a la casa de la colina en la que pasaba los veranos con su tía y allí se encontrará con Michael (William Edward Phipps [1922-2018]) quien ahora ocupa la vivienda.
2 + 1 = 3
- Como curiosidad Phipps había puesto la voz al Príncipe Encantador de LA CENICIENTA (1950)...
.. e igualmente pudimos verlo en la recientemente comentada INVADERS FROM MARS, aunque yo no lo recuerdo... -
Posteriormente se encontrarán con Oliver P. Barnstaple (Earl Lee [1886-1955])...
... y Charles (Charles Lampkin [1913-1989]) que viajan juntos en un jeep, ambos trabajadores del Banco de Santa Bárbara, el primero como auxiliar de caja y el segundo (lógicamente, dado que es afroamericano) como portero...
3 + 2 = 5
O sea, la cantidad total que indica la película.
Sin embargo, el educado señor Barnstaple muestra ya en su cuerpo los signos de la radiación que impregna la atmósfera que todos ellos respiran...
- Un gesto que se irá repitiendo en todos y cada uno de los protagonistas y que no augura nada bueno a corto, medio o largo plazo a pesar de lo que pudiera indicar el final (engañosamente) feliz de la película. -
... y su último deseo es ver por primera vez el mar antes de morir...
Inteligentemente Oboler sincronizará a la perfección el descubrimiento de un nuevo superviviente en la orilla de la playa, Eric, un famosa alpinista (James Anderson [1921-1969]), con la muerte del anciano y de esta forma seguirán siendo 5 los protagonistas.
5 – 1 + 1 = 5
Oboler basa su puesta en escena en buena medida en el uso de los primeros (yo diría que primerísimos) planos de los 4 (excluimos por ahora al bebé) supervivientes.
Lo cierto es que la misma, minimalista, es diametralmente opuesta a la de cualquiera de las cintas de ciencia ficción coetánea y donde, salvo en casos muy puntuales, apenas atisbamos a ver algún que otro esqueleto...
... teniendo en cuenta que las bombas y especialmente la radiación ha acabado con toda la humanidad… salvo los arriba citados…
Con la llegada de Eric al grupo empiezan las primeras fricciones pues este aparte de ser un racista cuestiona el (supuesto) liderazgo de Michael.
Además Eric está convencido de que si han sobrevivido no es porque Roseanne estuviese en el momento de la explosión haciéndose una ecografía (y por tanto protegida entre paredes de plomo) en el hospital, Michael en la cima del Empire State Building, Charles en el interior de la cámara acorazada del banco o el mismo al quedar aislado en la cima del Everest debido al mal tiempo sino a que son inmunes a las radiaciones.
Y si ellos lo son seguramente otros también.
Por tanto, su intención es dirigirse a las grandes ciudades dado que allí las probabilidades de encontrar más supervivientes serían mayores, algo de que lo discrepa y con razón Michael al aducir que son precisamente las grandes urbes las que han recibido el mayor castigo y o bien han sido arrasadas o bien los niveles de radiación son tan elevados que la supervivencia de cualquier forma de vida sería impensable… salvo que Eric tenga razón…
Un Eric, por cierto, que ya se ve a si mismo como un líder de masas, algo muy acorde con su (peculiar) ideología.
Oboler dará de nuevo en el clavo en la que seguramente sea la mejor escena de toda la película al simultanear de nuevo dos hechos tan trascendentales como son el nacimiento del hijo de Roseanne...
... y los primeros brotes del pequeño huerto que han plantado entre Michael y Charles.
Será precisamente este último el protagonista de la misma cuando declama un fragmento del poema “The Creation” (1927) del escritor (también afroamericano) James Weldon Johnson (1871-1938)…
Spoiler:
… quien haga de puente entre ambos hechos.
A pesar de que finalmente Roseanne ha aceptado el amor que le profesa Michael y de que sea plena noche aquella acepta inocentemente la propuesta de Eric de hacer un viaje en jeep durante unos pocos días con el fin de encontrar más supervivientes en las localidades más cercanas, incluida aquella en la que ella residía con su marido.
Sin embargo, Charles se da cuenta de las verdaderas intenciones de Eric e intenta avisar a Michael pero antes perecerá a manos del primero.
Evidentemente la idea de Eric es tener a Roseanne para sí mismo y convertirse en el rey (tuerto) del país de los ciegos.
Como decía al principio y a pesar de lo truculento de la trama apenas hay escenas donde se nos muestre la devastación total que ha sufrido el planeta.
Los cadáveres brillan por su ausencia aunque en este caso con toda seguridad el Código de Producción vigente lo hubiese vetado.
La escena más desgarradora (aparte de la muerte de Charles a manos de Eric) es aquella en la que Roseanne y su bebé visitan el edificio en el que trabajaba su marido y encuentra su esqueleto dado que en el fondo y a pesar de su nueva relación afectiva con Michael nunca había perdido del todo la esperanza de encontrarlo con vida.
Finalmente se demostrará que la teoría de la inmunidad de Eric no es más que… una teoría…
Roseanne volverá como al principio a vagar intentando llegar al refugio y, por su parte, Michael saldrá raudo en su búsqueda después de enterrar el cuerpo de su amigo Charles.
A pesar de los cuidados el bebé de Roseanne no sobrevivirá a las secuelas de la devastación...
Pese a ello el final abre una nueva puerta a la esperanza a la pareja, los nuevos Adán y Eva, aunque como hemos ido viendo la radiación, a corto, medio o largo plazo, seguramente acabe lo que inició la bomba del Juicio Final.
O tal vez no. Nadie lo sabe.
Desde luego FIVE es una de las cintas de ciencia ficción más atípicas de los años 50. De hecho, más bien parece una película de la década posterior. Incluso algunas de sus imágenes me remiten al Ingmar Bergman de los principios de su carrera y que el compañero mad dog earle me perdone si me he excedido en el elogio.
Destacar el trabajo de todos los protagonistas, especialmente el de Susan y el de Charles y la fotografía de un para mí desconocido Stoumen quien siguiendo las órdenes de Oboler parece intentar llegar al alma de los personajes con esos primerísimos planos a los que antes me refería.
Desde luego es llamativo que en una película de 1951 el marido de la protagonista sea afroamericano, algo que parece haber pasado desapercibido pero que se puede apreciar si uno se fija en la fotografía que Michael le muestra a Roseanne...
...; que el personaje más empático y humano (aparte de Roseanne) sea Charles...
... o que el texto más bello proceda de un poeta de color.
Tanto THE MAN FROM PLANET X como FIVE demuestran que para hacer una buena película no es tan importante el dinero como el talento.
Y aunque Ulmer era mucho mejor director que Oboler en este caso FIVE no solo es superior a THE MAN FROM PLANET X sino que me parece una de las propuestas más originales del cine de ciencia ficción de la Edad de Oro.
Vosotros mismos.
Misión cumplida.
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Comentario dedicado especialmente al compañero DrxStrangelove (huelga decir por qué) y por supuesto al resto de compañeros que participan en este nuevo y espero que duradero foro.
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