Con unas secuelas vergonzosas a sus espaldas, creo que solo volvería a un cine a ver algo de mi personaje favorito si repitieran de la original Darius Wolski en fotografía, la mítica partitura de Graeme Revell y por supuesto la dirección de Alex proyas. Como nada de eso va a darse conmigo que no cuenten, pues ya sufrí bastante con las soporíferas secuelas. Por cierto recomiendo el cómic a todo aquel que aun no lo conozca.