Concluida la segunda temporada. Andaba esperando a estas fechas de Octubre para verla.

No esta mal. Pero le hubiera convenido mucho si hubiera sido una miniserie independiente en vez de exponerse a ser eclipsada por la temporada anterior.
El nivel de producción es impecable, pero carece del ambiente hipnótico y envolvente que recordamos de su antecesora, por lo cual de entrada uno siente estar viendo un producto inferior.
Tarda en arrancar, y su gancho no es tan fuerte. Confieso que tenía la intención de dedicar un dia a maratonearla, pero acabé viéndola a lo largo de una semana.
El folclor japones es una jugosa fuente de terror que el show sabe explotar, el monstruo en turno es fascinante, pero tiene inconsistencias respecto a quien mata y a quien no que depronto se sienten demasiado convenientes.


También está el detalle personal de que me recordaba constantemente a un episodio de "TeenWolf" donde también tocan el tema de una amenaza sobrenatural en un campo de concentración americano, con todo y drama amoroso interracial de por medio.

Pese a todo, he quedado muy satisfecho y con la confianza de recomendarla.
Me gusta que explore una hecho histórico poco conocido, muy escondida bajo la alfombra de la historia de EU.
Mientras que en la temporada anterior el elemento fantástico parecía estar de sobra, o incluso estorbaba, en lo que ya era una buena historia, siento que esta temporada hace un mejor trabajo haciendo convivir la fantasía con la historia real.