Adicionar metraje apenas solucionaría nada. Anecdóticamente, sería interesante, por supuesto. Pero este film necesita, a mi juicio, una REESTRUCTURACIÓN, y eso es más inusual. No obstante, hay precedentes. Y en la propia Warner.
Helgeland readapta la novela The hunter de Westlake (la novela había sido adaptada por primera vez por Boorman en su maravillosa Point Blank, con Lee Marvin en modo Dios y un montaje y transiciones de rendición incondicional). La producción concluye sin incidentes aparentes y justo cuando comienza la postproducción a Warner le da por tirar de injerencias y se le planta en el cimbrel una suerte de modificaciones a todos los niveles, idiosincrásicos (fundamentalmente en el personaje interpretado por Gibson), narrativos y de tono principalmente. Helgeland les dijo que se montaran en su polla y pedalearan (educadamente, eso sí) y, días después de ganar el Oscar a mejor guion por L.A. Confidential, le dieron soberana patada. Se reescribió, "rerodó" y reeditó casi media película y la estrenaron un año después.
Pero con el tiempo Helgeland tuvo la oportunidad de retomar su labor y ofrecer SU visión primigenia en un film MUY diferente al del estudio.
Ya advierto que DUDO SOBREMANERA que algo así llegue a ocurrir con SS, pero oiga, precedentes, haberlos haylos...